Catedral de Santiago de Cuba, un símbolo de la ciudad

Catedral de Santiago de Cuba, un símbolo de la ciudad

23 may. Ubicada en el anillo fundacional de la villa, la Santa Basílica Metropolitana Iglesia Catedral de Santiago de Cuba es una insignia de esta urbe y del país antillano.

Aida Morales, titular del Departamento de Investigaciones Históricas de la Oficina del Conservador de la localidad, refirió en exclusiva a la Agencia Cubana de Noticias que la entonces Ermita de Santa Catalina, construida de guano y madera, fue modificada por una edificación de mejor categoría en 1522, cuando el Papa Adriano VI trasladó a Santiago la Sede del Obispado de Cuba y se le otorgó a la villa la condición de Ciudad.

Tras varios siglos de modificaciones debidas en su mayor parte a ataques de corsarios y piratas, en 1810 se inició la edificación de la que sería la cuarta y última Catedral, de cinco naves con estructuras de horconadura, techos y cúpulas de madera dura, a fin de que resistieran los posibles sismos.

Morales detalló que a partir de 1919 el arquitecto Carlos Segrera adaptó a la iglesia de estilo neoclásico un proyecto de arquitectura ecléctica, incrementando la altura de las torres campanarios y aumentando la magnificencia de la fachada principal.  

La Iglesia posee el Museo Arquidiocesano Monseñor Enrique Pérez Serantes, único de arte religioso en Cuba, que acoge obras sobresalientes como la pintura más antigua conservada en el país: el Santo Ecce Homo.

De acuerdo con Morales, en el templo están enterrados los restos de varios obispos y arzobispos de Cuba y del Adelantado Diego Velázquez, fundador de las siete primeras villas cubanas, pero se desconoce el lugar exacto.

Declarada Monumento Nacional en 1958, la Iglesia Catedral de Santiago de Cuba posee una arquitectura conformada en un 80 % de madera. Ha sido visitada por tres Pontífices: Juan Pablo II, en 1998; Benedicto XVI, en 2012; y Francisco, en 2015.